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mejillones
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vino blanco
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sal
Si hay algo que me gusta es
darme una vuelta por el mercado del pescado y comprar algo en el, hoy he
comprado mejillones, me pareció que estaban frescos y además baratos y no me
confundí así que compre un kilo.
Los vacíe en el fregadero y antes
de ponerlos en la perola les quite las barbas y algas que estos traían pegados
en su concha. Coloque una perola en el fuego y le eche un chorreon de vino
blanco, un limón partido por la mitad y un poco de sal, así conseguimos darle
mas sabor.
Eche los mejillones en la
perola y a los 3 o 4 minutos de estar en el fuego estos empezaron a abrirse
perfectamente y conforme se iban abriendo los iba sacando y echando en un
recipiente con agua fría para cortar la cocción, una vez fríos se sacan del
agua y se van separando la concha que quede vacía de la concha que quede con la
carne, se van colocando en un plato se le echa un poco de limón y a comer con
una buena cerveza.
